Te encargaás de preparar los pedidos, verificando que estén correctamente identificados y empaquetados para su posterior envío. Es importante también realizar el paletizado de la mercancía, asegurando su estabilidad y correcta disposición para el transporte.
Además, dentro de tus responsabilidades, se encuentra el mantenimiento del almacén en perfectas condiciones de higiene y seguridad. Esto implica seguir rigurosamente las normas de higiene alimentaria establecidas y las instrucciones proporcionadas.
También, deberás separar y gestionar los residuos generados en el almacén de manera segura y respetuosa con el medio ambiente, contribuyendo a prácticas sostenibles en el lugar de trabajo.